QUE TE VAYA BONITO NICOLÁS 

Honramos la vida del profesor Nicolás y recordar lo importante que fue para nosotros. Su ausencia ha dejado un gran vacío en nuestro programa, y su presencia se extraña en cada espacio compartido. Más allá de su dedicación y su valioso trabajo, nos quedamos con el recuerdo de su generosidad, su energía y la calidez que lo caracterizaba.

La partida del profesor Nicolás de este mundo terrenal ha sido profundamente dolorosa para nuestro programa. Lamentamos mucho no tenerlo más en los espacios de la universidad donde compartíamos con él de manera cotidiana. Su vacío se siente en las clases, en la oficina, en las salas de reuniones, en el LINAE y en las terrazas. Extrañamos su compromiso, su compañerismo, su energía, sus aportes, sus ideas y su valioso trabajo, pero, sobre todo, extrañamos su amabilidad, su disposición para ayudar y compartir, y en general, la maravillosa persona que era. 

Nicolás destacó por su responsabilidad, su aguda observación y su criterio certero. Siempre estaba dispuesto a analizar las situaciones con juicio y a dar su opinión fundamentada, sabiendo cómo transmitir soluciones y enfoques innovadores. Su capacidad de análisis y su mirada crítica fueron fundamentales en la resolución de numerosos desafíos, tanto dentro como fuera del aula. 

Su disciplina lo llevó a fijarse metas ambiciosas, reflejo de su destacada trayectoria profesional, a pesar de su corta edad. Nicolás era geógrafo de la Universidad Nacional de Colombia y tenía una Maestría en Desarrollo y Medio Ambiente. Además, cursó varios estudios en arquitectura, una carrera que le brindó conocimientos en diseño, los cuales luego aplicaría a la cartografía. Este enfoque le permitió crear piezas gráficas minuciosas y bellas sobre diversos temas, especialmente relacionados con el medio ambiente, área que le apasionaba profundamente. Sin lugar a duda, su capacidad para integrar estos campos, aplicándolos con creatividad y precisión, lo convirtió en un referente para muchos de nosotros.  

Uno de sus aportes más importantes a nuestro programa, y que refleja esta integración, fueron las 17 infografías sobre los 16 Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), elaboradas en el marco del Observatorio de Desigualdades Regionales y Construcción de Paz (ODER PAZ). Estas infografías incluyeron hitos históricos de las dinámicas territoriales y del conflicto armado, la representación gráfica de indicadores sociodemográficos y los conflictos territoriales entre actores sociales en cada una de las regiones PDET. Su desarrollo contribuyó a visibilizar los procesos socioterritoriales de la implementación del proceso de paz en Colombia ante un público más amplio. 

En el siguiente enlace podemos apreciar parte de su trabajo cartográfico: https://www.behance.net/nicopefo. 

En esta página también se destaca su gran talento para la fotografía y su amor por las aves, las cuales fotografió de manera impresionante, a pesar de su pequeño tamaño y habilidad para camuflarse en medio del paisaje. Esto es una clara muestra de su aguda capacidad de observación y su habilidad para asombrarse con las pequeñas maravillas de la vida.  

Las aves se convirtieron, para él, en un indicador del nivel de conservación de la biodiversidad en un territorio específico. Su presencia y bienestar se ven afectados por los procesos de degradación del suelo. Así, la admiración por las aves no solo surge de su capacidad de asombro, sino también de un genuino interés profesional y personal, que finalmente se transformó en un compromiso de vida con el cuidado y la preservación del medioambiente. 

Su firme convicción con el poder transformador de la educación lo convirtieron en uno de los profesores del programa más comprometidos y exigentes. Llevaba a sus estudiantes a esforzarse y ser cada vez mejores, implementando metodologías de aprendizaje que los hiciera competentes en el ámbito laboral. Su enfoque riguroso y su dedicación a la formación integral de cada uno de ellos los impulsaba a descubrir su máximo potencial, tanto dentro como fuera del aula.  

Hoy, le agradecemos sus enseñanzas y lo recordamos con gratitud. Su influencia seguirá viva en quienes lo conocimos, en las lecciones que nos dio y en los proyectos que impulsó. Su recuerdo será siempre una fuente de inspiración para seguir adelante con el compromiso, la dedicación y la humanidad que él personificó.  

El pasado 27 de febrero, como programa y junto a sus familiares, nos reunimos para honrar su memoria y recordar los momentos especiales que compartimos con él a través del arte y la creatividad. Pintamos, coloreamos y creamos colibríes en origami, soltando el dolor y agradeciendo la vida del profe Nicolás. Estos colibríes, juntos, forman la bandada que esperamos acompañe al profe, compañero, colega y amigo que fue Nicolás.