6 de marzo de 2020
[Covid-19 en China] Carta de bienvenida a los estudiantes para el semestre de primavera
En este discurso en el que se la da la bienvenida a los estudiantes de la Academia China de Arte, su rector Xu Jiang [1955-] nos da una idea del sentimiento de los ciudadanos chinos sobre lo que ha representado la época de cuarentena, como perciben el cambio tan abrupto que genera acatar todas las medidas impuestas por el gobierno chino para evitar la propagación del brote, es un claro reflejo de como un rector llama sus estudiantes a tener amor por el aprendizaje y sobre todo es un llamado a mantener la moral en alto porque esta será la única forma en la que se superara la situación actual china y se podrá retomar la vida normal del país.
Nota del traductor: el pasado lunes 17 de febrero daba inicio al semestre de primavera de la Academia China de Arte como a tantas otras instituciones educativas. Debido a la repentina epidemia causada por el coronavirus el pasado Año Nuevo Chino, inevitablemente este hecho pospuso la fecha de inicio del semestre y sin embargo esto no frenó el ímpetu de avance de estudio de los maestros y estudiantes. Ese día, el rector Xu Jiang envió por Internet esta carta a todos los alumnos con una grabación de él mismo leyéndola. El maestro Xu Jiang además de ser rector de esta institución universitaria especializada en artes y diseño, es pintor, poeta y un reconocido orador. La grabación comenzaba con su voz casi susurrando al oído y poco a poco subía su tono y pasión al leer. Su mensaje terminaba con su voz en alto emocionado por sus palabras de ánimo en estos tiempos especiales.
Este Año Nuevo
—— Carta de bienvenida a los estudiantes para el semestre de primavera
Xu Jiang, rector de la Academia China de Arte
Hangzhou, febrero 17, 2020
Queridos alumnos, en este momento me encuentro solo sentado al lado de la ventana y me dirijo a ustedes en este Año Nuevo tan especial. Originalmente deberíamos estar en el campus reunidos en este comienzo de primera de días de lluvias o sol templado. Pero ahora, al igual que todos ustedes, he tenido que quedarme en casa cerca de esta ventana sin salir por 22 días. Con excepción del primer día del Año Nuevo Chino [25 de enero] cuando tuve que ir al campus de Xiangshan y se suspendieron las clases previas del examen de la escuela adjunta de la Academia, y del tercer día del año cuando tuve que asistir a la reunión del comité del partido, y del medio día del dos de febrero cuando fui al campus principal donde se decidió cerrar la Academia, me he quedado aquí todos los días frente a esta ventana, observando los cambios del tiempo y siguiendo las noticias de la epidemia.
¡Qué Año Nuevo tan largo ah! Debido al coronavirus, el ambiente del Año Nuevo no es el mismo, la vida no es la misma, la ciudad no es la misma y la forma de comunicación e interacción entre las personas todo ha cambiado. Tocar a otra persona se ha vuelto peligroso, hablar cara a cara es extravagante, y las personas comienzan a preocupase por su salud y la de los demás. Precisamente en esta situación, hay algunos profesores y personal de nuestra universidad que valientemente sigue en las puertas de la Academia asumiendo sus responsabilidades y enfrentándose a la situación epidémica que puede estar acercándose en cualquier momento, pero ellos sin dar un paso atrás asumen firmemente sus responsabilidades y han completado con éxito la gestión de cerrar los distintos campus de la Academia, así como la organización y gestión de los dormitorios de los estudiantes internacionales y el establecimiento de la operación normal del comedor universitario. Algunos maestros, bajo el liderazgo del Comité del Partido, llevan a cabo su trabajo organizacional diligentemente, estableciendo una red para contactar a todos los maestros y estudiantes de la Academia, y transmiten de manera efectiva a todos las decisiones y requisitos diarios. Cada vez que pienso en estas personas valientes, siempre me preocupo por ellos y les expreso mis respetos.
¡Este es un Año Nuevo especial, Ah! Hay demasiadas sorpresas, demasiadas consideraciones y demasiadas cosas que nos conmueven. El personal médico de China, ahora carga con la responsabilidad de la sociedad, son la esperanza de salvación y son héroes que ponen su vida en riesgo. Hace una semana, desde mi teléfono móvil vi el video del tercer equipo médico de la provincia de Zhejiang que iba hacia a la provincia de Hubei [epicentro del virus]. Quien hacia el juramento en la pantalla era mi viejo amigo el director Chen Yagang. Llevaba puesto un tapabocas blanco y me parecía difícil reconocerlo. Normalmente sus ojos suelen ser tan humildes, en cambio ahora estaban tan firmes como un clavo. Su voz siempre tan cálida, ahora era tan sólida como el hierro. Esa escena donde veíamos sus cabezas afeitadas era como ver héroes que van hacia el combate. No pude contener esa pasión intensa y compuse un poema: “¿Eres tú?” El poema lo escribí apresuradamente y es bastante regular, pero quería usar esas palabras para expresar mi profundo respeto a un viejo amigo y expresar mis respetos a todos los trabajadores médicos que están en la primera línea.
Este Año nuevo he estado en casa por más de veinte días, durante este tiempo hice una pintura de un grupo de girasoles erguidos uno al lado del otro y la titulé “Nuestras voluntades se unen como una fortaleza.” Las flores llevan la voluntad de las personas, y los girasoles contienen sinceros sentimientos. La razón por la que el girasol se orienta hacia el sol, es porque produce una hormona conocida como auxina que permite que su corola pueda girar hacía la dirección del sol. Nuestros guerreros de blanco son las auxinas de nuestra nación que atienden el llamado del partido y de la patria, le dan prioridad a la vida, crecen en dirección del sol y persisten a pesar de los desafíos, no le temen a las dificultades y abrigan esperanzas en sus corazones, en resumen: nuestras voluntades se unen como una fortaleza. Hoy la epidemia es un reto, la vida está en juego y el cuerpo médico son quienes sostienen el cielo de nuestra nación.
Queridos alumnos, la epidemia ha retrasado el inicio de clases, y el Ministerio de Educación determinó no realizar clases en febrero. Esto es una necesidad para prevenir la epidemia, y también es una necesidad para proteger la seguridad de toda la nación. Por eso debemos hacer todo lo posible para acatarlo y cumplirlo concienzudamente. Antes de que se anuncie públicamente el retorno a clases no deben volver al campus. Lo anterior no significa que no habrá clases, pues el Ministerio también estableció que “Las clases se suspenden pero no la enseñanza y tampoco pararemos de estudiar”. Por lo tanto, llevaremos a cabo una enseñanza por Internet efectiva y particular según la situación de nuestra universidad, con énfasis en lectura, asignaturas selectivas en línea, introspección en circunstancias especiales, tareas para cada especialidad y revisiones en línea. Ante esta adversidad, nuestros maestros y estudiantes deben estar unidos, exploremos juntos el camino de la educación por Internet y que cada uno organice bien su propio sistema de aprendizaje. Dedíquense a sus cursos en línea, creen un espacio para la enseñanza recíproca y focalizada, reúnan sus fuerzas para convertirse en un alma sensible al mundo y a la humanidad en estos tiempos especiales.
Hace ochenta y dos años, nuestra Academia también sufrió una crisis sin precedentes. Nuestros maestros y estudiantes se enfrentaron con la invasión imperialista japonesa y tuvieron que recorrer miles de kilómetros atravesando media China. En Kunming reavivaron el fuego del arte y en Chongqing [la capital temporal durante la guerra] recrearon los talleres de enseñanza. Enfrentarse a la guerra, encontrarse con bandidos y sufrir hambre y frío, nada de eso detuvo el desplazamiento hacia el Oeste. Aquellos fueron los años de adolescencia de los maestros Wu Guanzhong [1919-2010] y Zhao Wuji [1920-2013], y fue la jornada que moldeó a Dong Xiwen [1914-1973] y Luo Gongliu [1916-2004]. Aquella generación de maestros y estudiantes nuestros no sucumbió. Ellos no se desmovilizaron, avanzaron hacia el ideal del arte, avanzaron hacia el rescate de la nación, marchando hacia adelante desafiando las olas y avanzando contra el viento. La generación de hoy debe tomarlos como modelo, erguir el espíritu del arte, mantener los ideales de la vida en alto, llevar adelante la tradición de superar las dificultades, templarse en los momentos de dificultades superiores y en esta crítica espera esculpir el futuro. Hace 80 años, el rector Teng Gu [1901-1941] en Kunming se encontró en una situación desesperada y desde su lecho de enfermo se dirigió a maestros y estudiantes para decirles: sigan mejorando los estándares académicos, establezcan un sólido método de estudio y una idea clara, desarrollen una personalidad sólida, aboguen por el restablecimiento de la educación artística y promuevan el espíritu de la autodisciplina. Él agregó con íntimo afecto: “Compañeros, espero profundamente que tengan en cuenta la responsabilidad de la educación nacional de las artes, y expresen una mentalidad abierta y fé ante el público. Compartamos esta carga y llevemos a cabo esta hazaña.” Aquellas fueron las palabras conmovedoras de nuestro maestro ancestral, su espíritu es tan alto como las montañas, y tan extenso como los ríos.
Este año nuevo no tuvo escenas bulliciosas, pero sí estrujó el corazón de China. Este año nuevo perdió la risa y la libertad de salir a la calle, y en cambio advirtió a cada persona la necesidad de ser más racional y más cuidadoso. Este año nuevo hemos perdido un tiempo precioso para comenzar las clases, pero os ha permitido esta rara experiencia de hacernos más fuertes. Este año nuevo, perdimos la intimidad entre las personas, pero en cambio hemos obtenido una nueva vida por Internet y otra forma de protegernos mutuamente. Este año nuevo se nos escaparon los planes y las oportunidades, pero hemos forjado nuestra aspiración común. Queridos alumnos: tenemos que esperar tranquilamente, unir fuerzas y trabajar en equipo. Espero que podamos volver al campus lo más pronto posible y disfrutar juntos bajo la luz del sol.
Xu Jiang, rector de la Academia China de Arte
2020.02.17
Introducción: Enrique Posada, U. Tadeo, Observatorio Asia Pacífico.
Traducción: Luis Cantillo (U. Externado/ U. Sichuan), Zhan Xinyu y He Jiawei (U. Sichuan).
Agradecimientos: Xu Jia, Wei Shan y Lu Ruiyang.